De los 564.000 nuevos cotizantes que se incorporaron en 2018 al sistema, el 85% fueron indefinidos, mientras que el número de parados se redujo en 210.000 personas hasta los 3,2 millones.
Los «desajustes» entre regiones llevan a que con una herencia de 800.000 euros se pague 105.000 euros en Asturias pero solo 130 en Canarias o 1.500 en Madrid.
La gran banca y las multinacionales de la construcción son las que tienen un tipo más reducido, solo pagan el 2,8% y el 3,5% de su beneficio.